Pienso q en la vida hay q ir apostando. Q lo q merece la pena siempre tiene dos caras, como una moneda. Y q la peor opción es dejar q decidan por ti. Q evadirse de decidir, sólo lleva a posteriormente lamentarse de lo q no se ha hecho.
Yo ya no sé cuándo ciertas actitudes arriesgadas pueden convertirse en actos habituales y cuándo la vida cotidiana es ya de por sí un riesgo continuo del que no somos conscientes. ¿Cuándo el riesgo es imprudencia y cuándo la sensatez señala firmemente que nos arriesguemos? ¿Hasta cuándo esta sensación de no tener ni puta de qué va la película de nuestras vidas?
2 comentarios:
Yo ya no sé cuándo ciertas actitudes arriesgadas pueden convertirse en actos habituales y cuándo la vida cotidiana es ya de por sí un riesgo continuo del que no somos conscientes. ¿Cuándo el riesgo es imprudencia y cuándo la sensatez señala firmemente que nos arriesguemos? ¿Hasta cuándo esta sensación de no tener ni puta de qué va la película de nuestras vidas?
Creo q eso es vivir nunca saber si de bes arriesgar o no. Pero lo peor es el arrepentimiento de no haber echo algo.
Gracias por sus comentarios.
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